¡Alertamos a la comunidad universitaria que nuestra salud y vida no están en venta!

Fotografía tomada de la página: https://almamater.hospital/

¡EXIGIMOS TRANSPARENCIA Y ACCESO A LA PARTICIPACIÓN EN DECISIONES QUE SE ESTÁN TOMANDO EN LA IPS UNIVERSITARIA, EN MEDIO DE UN PROCESO QUE VIENE ACONTECIENDO CON PRECARIZACIÓN SISTEMÁTICA DE VARIOS ASUNTOS, QUE SON VULNERADORAS DEL DERECHO INALIENABLE A LA SALUD Y AL TRABAJO DIGNO!

  1. Situaciones como el cambio de denominación de la IPS Universitaria por HOSPITAL ALMA MÁTER DE ANTIOQUIA. Aunque insistentemente nos indican que solo se refiere a un mero cambio de nombre, inquieta la falta de claridad sobre las implicaciones que esta decisión tiene en su relación con La Universidad de Antioquia. En particular, en aspectos tan importantes como las decisiones políticas, las modalidades de contratación administrativa y laboral, las tercerizaciones en los diferentes servicios y en la calidad de atención en salud.
  2. Desde hace unos años se viene deteriorando la prestación del servicio de salud con impacto negativo en la calidad de atención. Queja constante por quienes somos beneficiarios del Programa de Salud. Es preocupante que prime el interés mercantilista sin reconocer y actuar en consecuencia frente al rotundo fracaso del modelo de salud actual. NO puede ser aceptable que las medidas para subsistir en el medio, sea únicamente el cálculo de las ganancias basados en la rentabilidad y no la garantía del derecho y la prestación del mejor servicio de salud que merecemos. Al respecto, es necesario informar que se han venido realizando contrataciones con otras EPS para atender sus grupos poblaciones pluripatológicos, que exigen una altísima complejidad en la atención, sin las mínimas garantías y ajustes en los recursos, la infraestructura, las capacidades y el personal idóneo y necesario para responder adecuadamente a esas necesidades. Estas decisiones apresuradas sin planeación anticipada han hecho que la sobrecarga de trabajo recaiga en los trabajadores de salud. En este punto, proponemos la realización de una encuesta que pueda identificar las necesidades, incomodidades, quejas y sugerencias de usuarios y trabajadores, con el fin de que sea esta información la que oriente los procesos de mejoramiento de la calidad de la atención y no el afán de eficiencia en costos y rentabilidad por “autogestión”. La sostenibilidad de una IPS no es el dinero. Debe ser una institución que materializa el derecho a la salud y por ende una comunidad satisfecha y con sentido de pertenencia hacia ella.
  3. A este aterrador panorama, se suma una severa precarización de las condiciones del trabajo de nuestros queridos compañeros que nos atienden amorosa y solidariamente en esa nuestra Institución. Cabe recordar la paradoja que estamos presenciando cuando hace meses los elevábamos a la categoría de héroes por la pandemia y hoy en día ante nuestra indiferencia les están despidiendo y reduciendo marcadamente las condiciones de trabajo. A manera de ejemplo, preguntamos ¿Cómo se sentirían ustedes si les tocase atender con escasos recursos, poca asignación de tiempo para la consulta (para ingreso 40 minutos y control 30 minutos) y un número desbordado de pacientes con elevadísima complejidad en su salud, que en modelos respetuosos de cada paciente requieren como mínimo 1 hora para hacerles un ingreso soportado en la evidencia recopilada y como único momento de verdad para entablar una relación empática médico-paciente? En estas condiciones, les contamos que han ingresado 8.000 nuevos pacientes que se suman a la carga de trabajo ya sobrepasada por los aproximadamente 4.000 pacientes que se vienen atendiendo de la Nueva EPS y a los 2.000 del Programa de Salud de la UdeA ¡Qué tal! ¡Quienes hemos estado jurando con tranquilidad y ufanando que por estar en un régimen especial de salud vivimos con el privilegio de tener una atención en salud de la mejor calidad!
  4. La decrepitud de formación del talento humano en salud no es una causa menor. Es inquietante que la forma de enfrentar este perverso panorama sea volcar la formación y la prestación de los servicios de salud a un escenario virtual y con educadores que, por no tener la formación y experiencia, les resulta atractivos y eficientes en cuanto a indicadores economicistas, porque ya la docencia la pueden ejercer recién egresados que por tener habilidades tecnológicas resultan ser los idóneos para enseñar. Cuando lo que están haciendo cínicamente, es contratando la mano de obra más barata. ¿De verdad creemos que estas prácticas no están deteriorando la calidad de la formación y en consecuencia la entrega a nuestra sociedad de futuros profesionales que seguirán perpetuando un modelo de total deterioro en la relación médico-paciente, y el agenciamiento de solución a las problemáticas de salud que le demanden sus pacientes? Todo esto bajo la sombrilla de nuestra amada Alma Máter: LA PRESTIGIOSA UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA QUE TANTO NOS ENORGULLECE Y TODO LO PUEDE.
  5. Instamos el derecho a la pronta participación de todos los actores y estamentos que aquí se ven seriamente implicados con las decisiones que en el momento se están tomando en la IPS Universitaria y el Programa de Salud. En tantos los recursos públicos que deberían redundar para el funcionamiento de la Universidad, la IPS y las condiciones de trabajo digno se están esfumando.

Exhortamos a que se conforme de manera urgente una comisión en donde se sienten todos los actores, sectores y estamentos conjuntamente en la búsqueda de soluciones efectivas a todos estos problemas expuestos.

¡DEBEMOS DESPERTAR!

¿PARA CUÁNDO LA MOVILIZACIÓN O LA DECLARATORIA DE EMERGENCIA POR LA VIOLENCIA CONTRA EL DERECHO A LA SALUD Y AL TRABAJO DIGNO?

¡EL PATRIMONIO DE LA UNIVERSIDAD SE CUIDA Y SE RESPETA!

Asociación de Profesores de la Universidad de Antioquia -Asoprudea-

Sindicato de Trabajadores, IPS Universitaria -SintraIPSU-

Sindicato de Trabajadores y Empleados Universitarios de Colombia, Sede UdeA -Sintraunicol-

Medellín, 21 de septiembre de 2022.

Descarga el comunicado en PDF AQUÍ [+]

¡Rechazamos los actos de violencia en la Universidad de Antioquia, los atentados que sufrieron profesoras y personal administrativos en sus oficinas!

Comunicado de Asoprudea y Sintraunicol

Jamás apoyaremos ni aprobaremos acciones que generan intimidación y obligan a las personas a retirarse forzosamente de sus espacios de trabajo. “La violencia provoca emociones que limitan las posibilidades de reconocerla y valorarla” (Lamas, 2021:153) y conducen a situaciones que ponen en peligro la subsistencia y supervivencia de la Universidad Pública pretendiendo convertirla en un espacio de violencia irracional.

En especial, que ocurran estos actos tan reprochables, en medio de una movilización que vela por erradicar las violencias basadas en género al interior de nuestra Alma Máter es incoherente con las nobles causas de las luchas por el respeto, la Paz y la convivencia que permitan reunir los argumentos aún en la divergencia.

No admitiremos nunca como universitarios que ocurran acciones intencionadas a generar miedo, pánico y terror. Retornemos a garantizar un espacio de deliberación y construcción de propuestas de lucha contra un Estado Neoliberal, con un cambio en el pacto social que defienda la democracia en medio de una convivencia que proteja la vida y los derechos de cada una de las personas que habitamos esta comunidad.

Es necesario advertir que esta violencia distrae, desplaza y dispersa la atención que merecen también otros temas universitarios como salud, reforma de la Ley 30, la permanencia, la financiación, la precarización laboral docente y de la tercerización que obstruye la carrera administrativa y la defensa de la Paz Total y los DDHH.

¡La Universidad la seguiremos defendiendo solo como un espacio para el debate por medio de la palabra y la razón!

Olga Lucía Restrepo Espinosa

Presidenta Asoprudea

María Cecilia Plested Álvarez

Secretaria Asoprudea

Sara Emilia López Giraldo

Presidenta Sintraunicol

León E. Jaramillo Hernández

Fiscal Sintraunicol

*Descargue el comunicado original AQUÍ [+]

Consideraciones y exigencias al Grupo de Seguimiento del Decreto 1279 de 2002

Los profesores de las universidades públicas del país reunidos en la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Antioquia, el día 4 de agosto de 2022, realizamos las siguientes consideraciones y exigencias al Grupo de Seguimiento del Decreto 1279 de 2002:

1. Sobre medidas regresivas que limitan el reconocimiento de puntos salariales en la Universidades públicas del país, es importante anotar que ni el grupo de seguimiento al Decreto 1279, ni los Consejos Superiores o Comités Internos de Asignación de Puntaje son competentes para hacer una modificación al Decreto 1279 de 2002. Los topes máximos por productividad académica contemplados en el artículo 10 de Decreto 1279, hacen referencia a la asignación de puntos para la remuneración inicial de los docentes que ingresan por primera vez o reingresan a la carrera docente, o para los que proceden de otro régimen. La aplicación de este tope se refiere exclusivamente a la determinación del salario inicial de los docentes. De esta manera, la modificación de puntos salariales por productividad académica no tiene topes según lo estipulado en el capítulo III del Decreto y establecer topes anuales de puntos que se pueden evaluar y reconocer a cada docente es una modificación al Decreto, potestad reglamentaria exclusiva del Congreso de la República, que lo ha delegado en el Gobierno Nacional. Esto ha sido claramente señalado por el Consejo de Estado en Sentencia Radicación número: 11001-03-25-000-2005-00057-00(1873-05)

…Esta decisión jurisprudencial consonante con lo previsto en  el artículo 77 de la Ley 30 de 1992 y la Ley 4 del mismo año, lleva a la conclusión que el régimen de prestaciones que rige para las universidades públicas es el establecido por las normas generales que determine la ley cuando quiera que se encamine hacia la fijación del régimen salarial y prestacional de los empleados públicos y en todo caso, la  fijación de los topes y el porcentaje pensional no corresponde a los Consejos Superiores de las Universidades en ningún caso incluyendo a los docentes provisionales, por contera que la normatización que hizo el  Acuerdo No. 60 de 1992,  expedido por el Consejo Superior de la Universidad de la Amazonía, viola las citadas leyes, invadiendo una competencia reservada al legislador y al gobierno de manera concurrente, por consiguiente, habrá de declararse la nulidad del acto administrativo demandado que contenga aspectos salariales y prestacionales de los docentes ocasionales. Es decir, que el legislador impuso, en el régimen especial que expidió para las universidades públicas, sin distinción alguna, un límite a su libertad de acción, a su autonomía, en materia salarial y prestacional, que hace que el régimen de sus docentes en esas materias le corresponda fijarlo al gobierno nacional (Consejo de Estado, 2005)

2. El artículo 77 de la ley 30 de 1992 prescribe que: El régimen salarial y prestacional de los profesores de las universidades estatales u oficiales se regirá por la Ley 4a de 1992, los Decretos Reglamentarios y las demás normas que la adicionan y complementan. Por consiguiente, la autonomía universitaria se ve limitada en lo que a la fijación del régimen salarial y prestacional de los empleados públicos se refiere, razón por la que debe sujetarse a lo que al respecto decida el gobierno nacional en los términos de la Ley 4 de 1992, que en su artículo 2o señala que:

para la fijación del régimen salarial y prestacional de los servidores enumerados en el artículo anterior, el Gobierno Nacional tendrá en cuenta los siguientes objetivos y criterios:

a) El respeto a los derechos adquiridos de los servidores del Estado tanto del régimen general, como de los regímenes especiales. En ningún caso se podrán desmejorar sus salarios y prestaciones sociales;

c) La concertación como factor de mejoramiento de la prestación de los servicios por parte del Estado y de las condiciones de trabajo; (Ley 4 de 1992, artículo 2) (Subrayas fuera del texto original).

Por lo tanto, cualquier reforma al Decreto 1279, debe realizarse por el órgano competente y además ser respetuosa de los derechos adquiridos de los profesores de las universidades públicas. En ningún caso podrán desmejorar los salarios y prestaciones sociales (que tienen una relación directa en materia pensional), atendiendo al principio de progresividad y no regresividad en materia laboral. No son admisibles reformas inconsultas que vayan en detrimento de las condiciones laborales del profesorado.

3. Reivindicamos la aplicación y reconocimiento de los derechos consagrados en la Constitución Política de Colombia y en las decisiones jurisprudenciales, dada la obligación para las autoridades administrativas de aplicar de manera uniforme, en las decisiones que sean de su competencia, las definiciones de contenido y alcance de los derechos, que se deriven de las sentencias de unificación del Consejo de Estado y de manera preferente la jurisprudencia de la Corte alConstitucional.Dentro de los propósitos constitucionales que orientan la actividad de todas las autoridades se encuentra cumplir con las finalidades constitucionales del Estado de Derecho y garantizar la efectividad de los principios, derechos y deberes consagrados en la Carta. El hecho de que la Constitución establezca que las autoridades del Estado están encaminadas a garantizar los principios y derechos constitucionales tiene repercusiones fundamentales respecto de la interpretación constitucional, del alcance de las potestades de las autoridades estatales, y, por lo tanto, también de la forma como dichas autoridades deben ejercer sus funciones. Precisamente, para la creación de nuevas normas, los órganos del Estado deberán optar por aquellas interpretaciones que mejor desarrollen los derechos, principios y valores constitucionales. [1]

4. Con respecto a algunas interpretaciones que señalan la productividad académica como factor del desfinanciamiento de la Universidad pública es importante recordar que el estudio de Quimbay y Villabona (2017)[2] muestra que el desfinanciamiento de las universidades estatales en Colombia se asocia directamente con: 

  • (i) la disminución relativa y progresiva de los aportes de la Nación a los presupuestos de funcionamiento e inversión de estas universidades, cuyo efecto acumulado implicó que estos aportes fueran reducidos en un 44,4%, durante el período 1993-2015; 
  • (ii) la desvalorización relativa y progresiva del punto salarial, depreciado con respecto al salario mínimo en un 32,2% durante el período 1995-2017
  • Encontramos que los salarios promedio mensual y de enganche promedio de estos profesores, se mantuvieron aproximadamente constantes durante el período 2003-2013
  • También encontramos que los puntos salariales asignados por producción académica NO fueron la causa del desfinanciamiento de las universidades estatales (Pág. 3)

El verdadero responsable de la desfinanciación en las universidades públicas del país es la falta de recursos que debe transferir la Nación, producto de la Ley 30 de 1992 y de ahí la necesidad urgente de reformar los artículos 86 y 87 ya que la regla de indexación allí contenida actualiza la base presupuestal de las universidades del SUE con base en el IPC mientras los gastos y las inversiones de las universidades crecen por encima de la variación del IPC.

5. Como profesorado apoyamos  la propuesta de reforma que ha elaborado el SUE, la cual plantea un modelo que permite en lo fundamental: (i) ajustar la base según la variación del Índice de Costos a la Educación Superior (Ices) cuando este sea superior al IPC; (ii) la financiación del Decreto 1279 a partir de una canasta de 200.000 puntos anuales; (iii) ampliar la cobertura educativa en pregrado a 11.627 cupos por año equivalentes al 2 % del total de matriculados en 2021; (iv) la provisión de 3.000 plazas docentes al 2030; (v) 1.500 nuevas plazas administrativas en los próximos ocho años; y (vi) crear un fondo de recursos por $200.000 millones entre el 2023 y el 2030 para el cierre de brechas institucionales (Mesa, 2022)[3] y por tanto hacer una comunicación al nuevo ministro de educación para que se dé visto bueno al trámite urgente de esta propuesta en el congreso.

6. En lo relacionado con la publicación anual de la lista de revistas homologadas, consideramos los profesores de las IES públicas que ha sido un acierto que MinCiencias haya empezado a reportar ese listado en diciembre de cada año con una vigencia de un año.  Reducir la vigencia de las homologaciones a períodos de tiempo inferiores conllevan a esfuerzos innecesarios y generan una sensación de inestabilidad en el sistema que muy poco aporta. Queremos decir que el trabajo de indexación y homologación es competencia única y exclusivamente de MinCiencias y que por ninguna razón puede ser asumido por Comités al interior de las IES públicas. En caso de que en alguna institución se tengan dudas sobre malas prácticas en revistas homologadas en Publindex, como las que llevan a que la revista sea considerada depredadora, la institución podrá remitir una comunicación a MinCiencias para que este tome las acciones pertinentes, haga los estudios del caso, las revisiones a que dé lugar y decida incluir o no la revista en la homologación del año siguiente.

7. Por último exhortamos a este Grupo de seguimiento y al gobierno nacional para que sus acciones propendan por la dignificación de la labor del profesorado universitario, la reivindicación del derecho fundamental al trabajo en condiciones dignas y justas y la aplicación del principio de progresividad y no regresividad en materia laboral.

Suscribimos también esta comunicación los investigadores y coordinadores de grupos de investigación, Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la universidad de Antioquia.

Medellín, 4 de agosto de 2022


[1] Ver sentencias Corte Constitucional C-634 de 2011 y C- 539 de 2011.

[2] https://papers.ssrn.com/sol3/papers.cfm?abstract_id=3011933

[3] https://www.lasillavacia.com/historias/historias-silla-llena/horizontes-y-retos-de-la-reforma-a-la-ley-30-de-1992/

Descargue el texto original AQUÍ

Por una Universidad comprometida con el debate público

            Carta abierta a la administración de nuestra Alma Máter

Como docentes, estudiantes, egresados y, en general, como ciudadanos que nos sentimos representados por nuestra Universidad de Antioquia, manifestamos la necesidad de expresarnos públicamente al observar la falta de una presencia regular, coherente y trascendente de la Alma Máter que se pronuncie sobre el diario acontecer local, regional, nacional e internacional. Nos preguntamos si tal situación se debe, acaso, a la falta de una adecuada política comunicacional de la institución o, tal vez, a una estrategia comunicacional insuficiente que, por ejemplo, reconozca y privilegie el protagonismo contemporáneo de las redes sociales en el debate público.

Si algo caracteriza a Colombia, aparte de sus violencias centenarias, es la apabullante dinámica de hechos que, día tras día, compiten en importancia unos con otros. Los conflictos políticos y sociales -incluido el armado-, la precariedad del Estado para ejercer presencia y dirimir las confrontaciones, las crecientes desigualdades que sitúan al país entre los más inequitativos del planeta y el acontecer diario, no pueden pasar desapercibidos para la universidad y sus analistas e investigadores de la cotidianidad.

Como personas que reconocemos y requerimos el liderazgo indiscutible de la Universidad de Antioquia, nos preocupa la tendencia del tratamiento comunicacional de sus instancias académicas y administrativas, expresada en el manejo no siempre coherente y sistemático frente a hechos de trascendencia regional y/o nacional en las redes sociales hoy tan vigentes como influyentes, en las que otras universidades de renombre se manifiestan abierta y sistemáticamente de manera organizada.

Las universidades, y mucho más las públicas, deben estar pronunciándose en lo público, que es su escenario privilegiado, con un sentido de ciudadanía activa que debe ser siempre su guía. En ese sentido, por ejemplo, lamentamos que la administración de la universidad no se haya manifestado-o si lo hizo, no lo haya difundido ampliamente- frente a la designación de la doctora Carolina Corcho, egresada de la Facultad de Medicina, como ministra de Salud del nuevo gobierno nacional.

Consideramos que las redes sociales son un escenario estratégico y eficaz para que la universidad no solo comparta informaciones, sino también sus pronunciamientos, reflexiones y proposiciones sobre los hechos a través de sus investigadores, analistas y dependencias que son parte de su quehacer académico. Las declaraciones, el debate público y la formación de la opinión pública, fundamentalmente se juegan hoy en las redes sociales. Recordemos a la gran maestra María Teresa Uribe de Hincapié-q.e.p.d- cuando afirmaba que la actividad académica no se puede adelantar de espaldas a la realidad del acontecer sociopolítico.

La universidad no solo tiene el deber de ocuparse de sus dinámicas internas, sino también de mirar más allá de sus límites y difundir de forma sistemática, y a través de medios regulares y virtuales, las informaciones, análisis y pronunciamientos de administradores y académicos sobre el quehacer local, regional, nacional y-¿por qué no?- internacional. Nuestra universidad debe estar atenta a lo que sucede y le compete y fijar claramente su punto de vista como protagonista fundamental del debate público, paso previo decisivo a la hora de tomarse las decisiones políticas que a todos nos afectarán. Por ello y para ello, nuestra Alma Máter habrá de brillar y estar presente en el dinámico escenario de nuestra realidad nacional.

Medellín, 19 de julio de 2022.

PS. Adjuntamos nombres de quienes suscriben la comunicación.

-Hernán Mira Fernández. Profesor

-Luis Gonzalo Medina Pérez. Profesor y egresado

-Fabián Alberto Jaimes Barragán. Profesor

-Héctor Iván García García. Profesor

-Luz Helena Lugo Agudelo. Profesora

-Gabriel Jaime Otálvaro Castro. Profesor

-Joaquín Guillermo Gómez Dávila. Profesor

-Carlos Alberto Giraldo Giraldo. Profesor

-Pablo Javier Patiño Grajales. Profesor

-Claudia Marcela Vélez. Profesora

-María Helena Vivas Lopez. Profesora

-Luis Alfonso Yepes Bustamante. Profesor

-Sara Yaneth Fernández Moreno. Profesora

-Cecilia Plested Álvarez. Profesora

-Olga Juliana Cuellar Contreras. Profesora

-Olga Lucía Restrepo Espinosa. Profesora

-Astrid Helena Vallejo Rico. Profesora

-Claudia Fernández Franco. Profesora

-Juan Alberto Gómez Hernández. Egresado

-Omaira Reina Mejía. Egresada

-Wilmar Vera Zapata. Egresado

-Eduardo Nieto López. Egresado

-Álvaro Posada Díaz, Profesor

Educación posgradual gratuita y de calidad

Juan Camilo Domínguez, Instituto de Estudios Regionales, UdeA

Ganó la Presidencia de la República la opción que más claramente enarboló las banderas de una educación superior gratuita y de calidad. Es hora de celebrar, pero también de proponer. Y lo que le hace falta a las propuestas sobre educación superior gratuita es un programa de financiación directa de la educación superior de posgrados. La Ley 30 de 1992 dejó por fuera de la financiación del Estado a la educación posgradual en Colombia. Si educarse a nivel profesional es un privilegio, obtener un título de Especialización, Maestría y Doctorado pasa a niveles mitológicos o trágicos, porque implica para miles de estudiantes el tener que trabajar para estudiar lo que riñe directamente con el sentido de la formación posgradual y gastarse sus ingresos en pagar una matrícula que en las universidades públicas en el nivel de maestría ronda los siete salarios mínimos mensuales y en el nivel doctoral ronda los diez o, endeudarse para pagar los más de veinte millones que vale un programa de maestría o los más de 70 que vale un programa doctoral. Poco, muy poco avanza la ciencia, la producción de nuevo conocimiento, el diseño e implementación de políticas públicas, las propuestas de mejora de miles de prácticas industriales, comerciales o de investigación en ciencias sociales en un país si quienes tienen el talento encuentran una barrera de decenas de millones de pesos. Si la universidad pública de la Colombia del presente y del futuro quiere dar un verdadero salto cualitativo en su capacidad de aportar a las trasformaciones que vienen requiere quitar la barrera monetaria del ingreso en los posgrados.

Que ningún egresado de Colombia, de universidad pública o privada, tenga que pensar en cómo pagar su formación en posgrados ya pasa de ser una utopía a una posibilidad y esto se da gracias a que hoy, ya de facto las universidades públicas cofinancian con el tiempo de sus docentes pagados con los recursos de la Ley 30 más del 50% del costo de funcionamiento de los programas. Si las universidades públicas cobraran el 100% del costo real de cada programa de posgrado estarían a la par o incluso por encima del valor de las matrículas de las universidades privadas de la élite colombiana. Así que un aumento en los ingresos de las universidades en una reforma a los artículos 86 y 87 de la Ley 30 también debería verse reflejado en una mayor capacidad de reducción de costos de los posgrados, incluso llevándolos a cero.

Sometidos al debate de la financiación de la educación superior pública, debatamos de fondo la financiación de TODA la educación superior pública, saquemos por fin de las garras del neoliberalismo el talento relegado por la falta de financiación de los programas de posgrados. Eliminemos la frontera entre los recursos de la Ley 30 destinados a la educación técnica, tecnológica y profesional y los recursos propios que los programas de posgrados deben conseguir con las matrículas de sus estudiantes; eliminemos así estas dos universidades que co existen, una pública y de matrícula 0 y una pública, pero a su vez privada, de matrícula millonaria. La educación posgradual debe ser para todos, no solo para los mejores graduados o para quienes tienen capacidad de endeudamiento o paciencia para aplazar su plan de vida mientras eligen entre matricula o emancipación, matrícula o casa propia, matricula o vida. Que el único criterio para presentarse y ser admitido a un programa de posgrado sea el mérito no la capacidad de pago.

Que la educación sea pública, gratuita y de calidad para todos y en todos los niveles realmente existentes y que tras un debate serio podamos decir como hoy decimos en lo electoral: ¡Sí se pudo! Claro que se puede.

Sexagésimo aniversario de Asoprudea

Olga Lucía Restrepo E., presidenta

[…] Es momento de honrar, celebrar, festejar y brindar por la vida, la lucha y el legado que tantas personas que nos precedieron nos encomendaron y de quienes hoy nos acompañan con profundo aprecio y entusiasmo para seguir con el relevo que siempre asumimos con especial esmero de glorificar el privilegio de contar hoy todavía con este espacio con el mismo deseo de seguir uniendo y sumando fuerzas en torno a preservar la prestigiosa función de formación, investigación y extensión de nuestra querida Universidad.

Es por esto, que hoy también con gran emoción anunciamos con convicción de que, al fin, saldaremos una deuda que por más de diez años manteníamos pendiente. Con gran expectativa hemos por fin logrado concretar una propuesta de reforma de nuestros estatutos con un específico propósito de abrir las puertas de nuestra Asociación para abrazar con igual calidez a la mayor proporción de personas que con contratos de cátedra cumplen cabalmente la misión de docencia. Sería inconsistente e incoherente que no acogiéramos a estas personas que hacen también con compromiso, su labor misional en las más precarias condiciones contractuales. A estas personas les decimos que prometemos culminar el proceso interno de aprobación de la misma reforma para poder acogerles por fin con la misma solidaridad, fraternidad y sororidad con la que la asociación se ha distinguido históricamente y ha consolidado una escuela que es ejemplo e inspiración para todas las demás universidades públicas del país.

Comunicado a la comunidad universitaria

Las Profesoras y los Profesores de la Universidad de Antioquia, reunidos en Asamblea el viernes 25 de marzo de 2022, y luego de tratar como tema único el Acuerdo Superior por el cual se establece una nueva estructura disciplinaria en la Universidad de Antioquia; se adoptan un régimen disciplinario aplicable a los servidores universitarios, un procedimiento disciplinario para los estudiantes de pregrado y posgrado, y se dictan otras disposiciones. Entre ellas, la necesidad también de revisar los proyectos de Acuerdo Superior sobre las Violencias Basadas en Género (VBG). Acuerdo que surge porque actualmente, la Ley 734 de 2002 se deroga a partir del 29 de marzo de 2022 por el artículo 265 de la Ley 1952 de 2019, modificado por el artículo 73 de la Ley 2094 de 2021. Por tanto, la Asamblea manifiesta que:

  • Es necesario exigir que se atesore y anteponga la dignidad docente a los procesos administrativos.
  • Actualmente, no se ha logrado una participación amplia, inclusiva y efectiva para llevar a cabo un debate que culmine en la concreción de una norma en construcción con destino a ser aprobado por el CSU. Ese esfuerzo no puede quedarse solo en el diligenciamiento a título individual de un formulario publicado en el portal universitario con el fin de recibir sugerencias y comentarios. Ello, requiere de una discusión juiciosa y con argumentos propia de una comunidad académica pensante y deliberativa en el accionar de los desarrollos de la Institución.
  • Sobre la nueva estructura disciplinaria, en la decisión de fallo en segunda instancia, se deba nombrar una comisión o instancia que cumpla con el principio de neutralidad e independencia y que la misma esté conformada por personas que cuenten con un perfil garante del cumplimiento de esta labor. 
  • Respaldamos a nuestras Representaciones Profesorales en los Consejos Académico y Superior al tomar decisiones acordes a los lineamientos del estamento profesoral que representan.
  • A propósito de los proyectos de sensibilización frente a violencias de género naturalizadas en la Universidad, se ha dejado de lado la diversidad universitaria, que no es solo en términos de orientación e identidades de género o sexual sino también lingüística, étnica y cultural. Se precisa socializar con esas otras poblaciones sordoseñante, invidente y ancestral, para hacer pedagogía y comprensión de estos postulados
  • Llevar el debate sobre las VBG y demás asuntos disciplinarios a todos los espacios de la vida universitaria.
  • Convocamos al profesorado para que socialice estos temas, por claustro a nivel de facultades, escuelas, institutos y corporaciones con una vocería argumentada, garantizando agilidad en las discusiones dadas en espacios asamblearios. Se espera que de esta manera se agilicen las discusiones en medio del fortalecimiento para asegurar redistribución de poder político.
  • Se debe continuar la discusión sobre el Estatuto General haciendo énfasis en metodologías que faciliten una participación incluyente del profesorado. Alertando que como lleva décadas sin ser actualizado se debe contemplar las modificaciones conforme a los avances, dinámicas y cambios de contextos que han exigido ajustes en temas de gobernabilidad, descentralización, articulación de los lineamientos con todo el programa pedagógico. Invitar a los Consejos de todas las unidades académicas a mantener siempre informada a sus bases profesorales y facilitar espacios para la discusión y reflexión digna de una institución pública académica de calidad al servicio de la docencia, investigación y extensión.

Medellín, 25 de marzo de 2022.

ASAMBLEA GENERAL DE PROFESORES DE LA UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA

Gratitud eterna a nuestro fundador y perenne presidente de la Asociación de Profesores

¡El maestro y dirigente ejemplar con una propuesta para candidatizarlo al premio Nobel Póstumo de la Paz!

“Es la vida pues, un bien en sí misma para la conciencia humana”

Héctor Abad Gómez (1).

Tal vez sea el azar o quizás el universo que confabula para que perduren inquebrantablemente la voz, la vida, el ejemplo, la inspiración y la valiente lucha por la defensa de las libertades fundamentales y un mundo justo, equitativo, bello, saludable (2). 

Igualmente, libre de los más letales fanatismos globalizantes de la temida banalidad del mal y absurdos totalitarismos que reducen a los seres humanos a su “ínfimo denominador común posible de “reacciones idénticas” y que creen penosamente que “la muerte física es sólo una consecuencia lógica innecesaria para la permanencia del régimen” (3).

Sí. Esas fuerzas empecinadas en conservar así sea a muerte el “orden constituido” que le prosigue sin límite el privilegio y poder y con el que nunca posibilitará que “existan otras formas sociales mejores” (4) por las que Abad Gómez sacrificó su vida entera, convencido tal vez de que serían las que nos guiarían hacia esa sociedad pluralista, incluyente y garante de la vida, la salud, la educación, el amor y el placer en completa y democrática paz.

Por azar o por confabulación, estando sentada en búsqueda de las palabras perfectas para este glorioso acto, me llega un regalo de una inolvidable alumna mía caleña, a su vez huérfana por el violento asesinato de su padre -otro brillante médico, cirujano de tórax y profesor vinculado a la Universidad del Valle-, asesinato ocurrido en el año de 1994 con el mismo modus operandi y por las mismas mentalidades conglomeradas y aliadas para expandir la peor, la más perversa y codiciosa empresa de la muerte que sigue nublando toda posibilidad de materialización de los mismos loables propósitos de Héctor Abad Gómez, fundador y eterno presidente de esta valorada Asociación de Profesores de nuestra Alma Máter.

Hoy, me llega un artículo médico que habla sobre la gratitud desde la neurobiología y la clínica del que extraigo varias ideas para justificar nuestra propuesta de aunar esfuerzos para el logro de su candidatura al Premio Nobel póstumo de la Paz. Nuestro anhelo, persuadir a la Academia de Suecia y el Comité de Noruega para que realicen una nueva excepción a la lamentable decisión tomada en 1974 de no otorgar más premios de esta categoría (5). Dicho artículo define además que la gratitud es un fenómeno que involucra varias áreas cerebrales para reconocer, interpretar, valorar y responder a estímulos cognitivos, emocionales, internos o externos (6). Este fenómeno mejora sorprendentemente parámetros físicos, emocionales, incluso biológicos para combatir enfermedades y alcanzar un bienestar y calidad de vida. Por tantos beneficios perfectamente medidos en zonas cerebrales y en capacidades cognitivas y sociales se nos invita a promover la gratitud. Además, destaca dos actividades con las que se puede estimular la gratitud y los efectos positivos que ello tiene en el cerebro y otros sistemas orgánicos, así como en la salud física, mental y social de individuos y de colectividades: la carta de agradecimiento a alguien por su acto generoso o un diario con un listado de las múltiples acciones que alguien llevó a cabo por el bien de muchas personas.

Sin lugar a dudas, Héctor Abad Gómez merece un diario de gratitud. Por lo tanto, procedo a enumerar las acciones que dan cuenta de su magna obra en pro de la defensa de la vida, los derechos de los ciudadanos, la educación pública con calidad, la paz y la democracia. Tantas razones por las que le debemos eterna gratitud. Se impone incluir, al menos, la gran mayoría de logros que nuestra Asociación de Profesores y nuestra Alma Máter han disfrutado gracias a su valiente, incansable y admirable lucha a lo largo de su vida profesoral y que conforman una primera lista, parte de un ámbito muy local en la Institución pero que su eco se extendió hacia otras universidades del país y de la región latinoamericana (7,8):

  1. El profesor Abad siendo apenas un estudiante de medicina de la Universidad de Antioquia en el año de 1945, fundó el periódico U-235 con la intención de “no callar ante las injusticias y decir totalmente la verdad, sin ninguna restricción” (9).
  2. Con “conciencia clara de su estar en la universidad” y “su condición de ser limpio, transparente, […] repleto de esa dimensión inconmensurable del amador de la vida y de todos sus transeúntes” funda la Asociación de Profesores de la Universidad de Antioquia. Proyecto que inicia desde finales de los años 50 y materializa el 2 de marzo de 1962. Con ello, defendió el derecho a la agremiación para la defensa de la “profesión del educador universitario” con condiciones y bienestar laboral como la estabilidad laboral, la libertad de cátedra, bonificaciones y apoyos financieros para acceso a condiciones dignas como alimentación, y vivienda, entre otras.
  3. Asumió con decoro, entrega y compromiso la presidencia de esta su asociación al menos en cinco oportunidades en los años: 1962, 1963,1973, 1979, y 1980. Siguió un papel de dirigencia sin descanso en ella hasta el año de 1982, año en que fue obligado a jubilarse por parte de las directivas de la Universidad dejando una sensación de orfandad, profunda tristeza e indignidad en la gran cantidad de compañeros y alumnos seguidores de sus ideales formados con su ejemplo, pensamiento y obra como férreos defensores de sus causas.
  4. Desde el momento de la fundación de la Asociación consigue un reconocimiento institucional y gubernamental. Los siguientes son sus múltiples logros que nos dejó:
  • Establecimiento de un Fondo de Seguro de Vida en 1963.
  • Un acuerdo universitario que consolidó la aprobación de un Estatuto Profesoral (Acuerdo 10 de 1962).
  • Expansión de beneficio de la Asociación hacia profesores con vinculación de medio tiempo bajo la modificación de sus estatutos en 1968.
  • En 1969 se creó el Fondo de Préstamos.
  • En 1970 se conforma un Comité de Vivienda.
  • En 1971 se expide un nuevo Estatuto Profesoral previa concertación con la asociación (Acuerdo 7 de ese año).
  • Constitución de la Oficina de Bienestar Universitario extensiva a estudiantes y empleados en 1971.
  • Establecimiento de límites de carga académica para el profesorado vinculado de medio tiempo y tiempo completo en 1973.
  • Creación del Fondo de Bienestar Universitario en 1973.
  • Reintegro de docentes despedidos sin justa causa entre 1971-1974. Incluido entre éstos el mismo Héctor Abad.
  • Concreción del número de estudiantes máximo por curso en defensa de la calidad docente en 1975.
  • Reconocimiento de labores docentes a técnicos de laboratorio en 1978.
  • Establecimiento del Programa de Asistencia Social en Salud (PRASS) en 1979 para fortalecer la atención en salud a familias del profesorado con aportes distribuidos así: 50% la universidad y 50% el docente.
  • Promoción y creación de la Cooperativa de Profesores de la Universidad de Antioquia: COOPRUDEA en 1981.
  • Aprobación de descarga académica para profesores en cargos de representación en diferentes instancias directivas y gremiales en 1982.

Asimismo, la Asociación en los años después de su muerte, ha continuado conquistando innumerables éxitos que trascienden el ámbito institucional y el municipal. Para el año de conmemoración de los 50 años de fundada ASOPRUDEA se sumaban trece nuevos logros que demuestran el rastro del ambicioso plan que se había trazado nuestro eterno presidente. Es posible afirmar que su sueño de lograr una Federación Nacional de Profesores de Universidades Públicas lo culminen sus alumnos y sucesores.

A partir de la jubilación impuesta por la Universidad, el dirigente ascendió su acción por la defensa de los derechos humanos escalando al cargo de presidente regional de una instancia de mayor envergadura como lo es el Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos. Para entonces, se dedicó sin miedo y con tesón a denunciar las masacres, torturas y desapariciones. Un solo ejemplo, da cuenta de su excelsa acción que se intensifica a partir de 1984 (10):

Su consagrada labor de denuncia de la desaparición del joven Luis Fernando Lalinde, en Jardín, Antioquia, cometida por hombres del Ejército Nacional con acompañamiento a su afligida madre la señora Fabiola Lalinde. No solo pudo llevar el caso hasta la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA, sino que de allí elevó el caso hasta “la Corte Interamericana de Derechos Humanos”, instancia que condenó al Estado colombiano en septiembre de 1988, por su responsabilidad en la desaparición del joven Lalinde. En 1993, la madre recibió los restos óseos de su hijo de manos del propio Ejército, quien terminó reconociendo su participación en este hecho” (11). Para la señora Lalinde, su gratitud con el Dr. Abad se afirma cuando pudo al fin dar santa sepultura a su hijo el 19 de noviembre de 1996 día en que al fin recupera los restos. Así, culminan “doce años ininterrumpidos de lucha contra el olvido y la impunidad” (10).

No resulta extraño que para el año de 1987 de nuevo incursionara en su tarea de fundar el Primer Comité de Derechos Humanos en el Departamento de Antioquia (12). Igualmente, en ese mismo año, en mayo 10 se distingue como precursor del Tercer Foro en Puerto Nare Magdalena Medio (12).

Su vasta obra bien documentada y compilada por tantas personas que lo admiraron y amaron deja bien sentada con total transparencia, su honestidad, claridad y humildad en “sus posiciones sobre la injusticia social, la inequidad y los abusos de los derechos humanos, los derechos de todos” (13).

El espacio académico que instauraron sus amigos, colegas, alumnos, seguidores y familia en cabeza del médico y profesor emérito Hernán Mira Fernández desde el 2008, la “Cátedra de Formación Ciudadana Héctor Abad Gómez”, “un aporte a la construcción de civilidad” con el fin además de asegurar que su voz y las voces de todos aquellos profesores de la Universidad de Antioquia y líderes sociales de la región y el país asesinados sigan vivas por siempre como un faro y un horizonte en constante. Tal y como lo enuncia el profesor Mira, que sea siempre una bandera por la “defensa de los Derechos Humanos para la ciudadanía toda, para los demócratas y para los humanistas que tienen como guía permanente la defensa de una vida digna para todos, como siempre fue la de estos universitarios inmolados en defensa de esta, la más noble causa humana” (14).

El tiempo y el espacio no será nunca suficiente para seguir nutriendo este diario de gratitud con la lista completa de acciones y obras que Héctor Abad Gómez legó al mundo. No obstante, para nosotros como junta y Asociación de Profesores, es suficiente para probar que pueden ser, si no más, por lo menos los mismos méritos que distinguieron a los ganadores de los Premios Nóbel de la Paz: Jane Addams de Estados Unidos en 1931, Martin Luther King de Estados Unidos en 1964, Adolfo Pérez Esquivel de Argentina en 1980, Óscar Arias Sánchez de Costa Rica en 1987, Aung San Suu Kyi de Birmania en 1991, Rigoberta Menchú de Guatemala en 1992, Malala Yousafzai de Pakistan en 2014 y Juan Manuel Santos Calderón de Colombia en 2016 (15). Por supuesto, que celebramos que estas valientes personas también lo hayan recibido, no faltaba más, ya que sabemos que sus acciones también merecen este reconocimiento y un diario de mucha gratitud.

Por todo lo expuesto aquí y muchas razones más, damos gracias por el nacimiento y vida que gestó Héctor Abad Gómez. Y como bien lo expresaron los profesores Fabio Alberto Henao, Juan Ignacio Sarmiento y Giovanni Vargas en su conferencia en la Cátedra Héctor Abad Gómez, prometemos seguir su mandato presidencial presente siempre como nuestra guía.

“Pero ante todo como universitarios y ciudadanos de a pie continuaremos con la búsqueda de la paz como el principal requisito para vivir mejor y la importancia que hoy tiene el acuerdo humanitario para avanzar por ese tortuoso camino de no continuar matándonos entre nosotros mismos. “Enamorados de la vida y resentidos con la muerte a la vida por fin daremos todo y a la muerte jamás daremos nada” (16).

Igual que como lo soñaste FUNDADOR Y PRESIDENTE seguiremos en la búsqueda implacable por honrar tu vida con la culminación de ese tu gran sueño que bien sintetiza William Ospina con estas palabras dedicadas a ti y todas aquellas personas que no están con nosotros pero que siguen a tu lado gritando que no desfallezcamos para alcanzar “un mundo que honre la inteligencia, que respete el espacio sagrado de la conciencia individual y que exija de todos los individuos unos nítidos deberes sociales” (17). Eso y más nos legaste en toda tu vida como estudiante, profesional y docente universitario de gran humanismo, dirigente gremial y político intachable y de inmensurable valentía.

¡HASTA SIEMPRE Y GRACIAS PRESIDENTE, NUESTRO PREMIO NOBEL DE LA PAZ PÓSTUMO!

Medellín, 2 de diciembre de 2021.

Junta Directiva

Asociación de Profesores de la Universidad de Antioquia

REFERENCIAS:

  1. Abad-Faciolince, Héctor. (2007) “Manual de tolerancia”. Editorial Planeta y Editorial Universidad de Antioquia. Pág. 59.
  2. Asoprudea (2012) “La Universidad de Antioquia en perspectiva de las políticas de educación superior” en 50 Años de Historia, Corporación Rizoma: Cultura y Sociedad. Pág. 21
  3. López, Marina. (2010) “Arendt, Eichmann y la banalidad del mal” en ARBOR Ciencia, Pensamiento y Cultura: CLXXXVI, 2010, 742, marzo-abril: 287-292. Disponible en https://www.researchgate.net/publication/42607346_Arendt_Eichmann_y_la_banalidad_del_mal
  4. Abad-Faciolince, Héctor. (2007) “Manual de tolerancia”. Editorial Planeta y Editorial Universidad de Antioquia. Pág.31
  5. BBC de Londres (2021) “Las dos veces que el Premio Nobel se entregó póstumo (y una tercera en que no sabían que el galardonado estaba muerto). Disponible en https://www.bbc.com/mundo/noticias-58800338
  6. Tala, Álvaro. (2019) “Gracias por todo: Una revisión sobre la gratitud desde la neurobiología a la clínica” Revista Médica de Chile, 147(6) 755-761. Disponible en https://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0034-98872019000600755
  7. Velásquez Gallego, Francisco. (1997) “Dos vidas ejemplares Héctor Abad Gómez y nuestra Asociación de Profesore Universidad de Antioquia” En Asoprudea (2012) 50 Años de Historia, Corporación Rizoma: Cultura y Sociedad. pg:129-134)
  8. Asoprudea (2012) “Realizaciones” en 50 Años de Historia, Corporación Rizoma: Cultura y Sociedad. Pág. 127-129.
  9. Henao Acevedo, Fabio. (2009) “Presentación U- 235 in memoriam” en “Cátedra de formación ciudadana “Héctor Abad Gómez”: Un aporte a la construcción de civilidad: memorias 2008-2009: 45. Disponible en https://www.udea.edu.co/wps/wcm/connect/udea/2b983512-b2ce-4087-9998-715190c9308c/catedra08.pdf?MOD=AJPERES
  10. Franco, Saúl. (1998) “Héctor Abad Gómez: Un visionario de la Salud Pública”. Disponible en https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/5331805.pdf
  11. VerdadAbierta (2014) “Héctor Abad Gómez: ¿crimen de lesa humanidad? Disponible en https://verdadabierta.com/hector-abad-gomez-crimen-de-lesa-humanidad/
  12. Quiroz Alzate, M. F. (2021) “Héctor Abad Gómez, mensajero de la vida y defensor de los derechos humanos” tomado de www.rebelion.org, Disponible en https://asmedasantioquia.org/2021/03/09/hector-abad-gomez-mensajero-de-la-vida-y-defensor-de-los-derechos-humanos/
  13. Cabrera Arana, G. A. (2017). A Héctor Abad Gómez, a 30 años de su muerte. Revista Facultad Nacional De Salud Pública, 35(2). Recuperado a partir de https://revistas.udea.edu.co/index.php/fnsp/article/view/328015
  14. Mira Hernández, Hernán. (2009) Presentación en “Cátedra de formación ciudadana “Héctor Abad Gómez”: Un aporte a la construcción de civilidad: memorias 2008-2009”. Disponible en https://www.udea.edu.co/wps/wcm/connect/udea/2b983512-b2ce-4087-9998-715190c9308c/catedra08.pdf?MOD=AJPERES
  15. Wikipedia: Premios Nobel de la Paz. Disponible en https://es.wikipedia.org/wiki/Portal:Premios_Nobel/Premio_Nobel_de_la_Paz
  16. Henao Acevedo, Fabio. (2009) “Presentación U- 235 in memoriam” en “Cátedra de formación ciudadana “Héctor Abad Gómez”: Un aporte a la construcción de civilidad: memorias 2008-2009” págs. 45-48”. Disponible en https://www.udea.edu.co/wps/wcm/connect/udea/2b983512-b2ce-4087-9998-715190c9308c/catedra08.pdf?MOD=AJPERES
  17. Ospina, William. (2009) “Del ser como obra maestra” (:25) en “Cátedra de formación ciudadana “Héctor Abad Gómez”: Un aporte a la construcción de civilidad: memorias 2008-2009” (17-28). Disponible en https://www.udea.edu.co/wps/wcm/connect/udea/2b983512-b2ce-4087-9998-715190c9308c/catedra08.pdf?MOD=AJPERES